Partiendo de los principios de la economía circular, en CEMEX contribuimos a mitigar los retos de la gestión de residuos a los que se enfrentan ciudades, gobiernos y comunidades de todo el mundo.

En este sentido, nuestro objetivo principal es maximizar el uso de los residuos producidos por la sociedad y otras industrias dentro de nuestras plantas. Durante el 2021, se consumieron cerca de 23 millones de toneladas de residuos y de subproductos no reciclables. Esto equivale a más de 57 veces la cantidad de residuos enviados a rellenos sanitarios.

Nos encargamos de recuperar el 95% del total de los residuos generados, para reutilizarlos o reciclarlos dentro de nuestras operaciones. Así, solo el 5% llegó al relleno sanitario.

Para 2030, nuestra meta es aumentar en un 50% la cantidad de residuos y subproductos que capturamos como combustibles alternos y materias primas alternas.

En CEMEX contamos con el conocimiento necesario para adquirir, procesar, almacenar y recuperar energía de residuos de manera responsable. Los hornos para la producción de cemento son ideales para eliminar residuos no reciclables de forma segura y sostenible, mismos que se pueden usar como alternativa a los combustibles fósiles en vez de acabar incinerados o en rellenos sanitarios.

También estamos extrayendo los minerales de residuos para utilizarlos como materias primas alternas. Esto es posible ya que en el proceso de producción del cemento sustituimos parte del clínker con subproductos de otras industrias, como cenizas volantes y escoria. Por otra parte, consumimos residuos provenientes de la construcción y demolición, como agregados alternos.

Tenemos como objetivo maximizar la reutilización del polvo de los hornos de clínker y, cuando esto no es posible, nos esforzamos en recuperar estos subproductos para usarlos como estabilizador de tierra o caminos, fertilizante o agente para descongelar calles durante el invierno.